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Para los entusiastas del esquí o los deportes wake, no hay nada que se compare con —la estela— y el perfecto desafío que produce un bote con motor intraborda, especializado para deportes de arrastre. El clásico bote para esquiar tiene un casco con un ángulo poco pronunciado en la parte posterior del barco. A este ángulo se le conoce como la “astilla muerta” del espejo de popa. Generalmente, el motor en los botes para esquí está colocado en el centro del barco. Esto, en combinación con el espejo de popa superficial, permite que el barco se desplace en una postura nivelada. Lo que con ello se logra es una magnífica aceleración y un tamaño de estela mínimo, permitiendo que los esquiadores de slalom se levanten y posicionen sobre el agua rápidamente para regresar, a la brevedad y con toda naturalidad, a zigzaguear artísticamente detrás del bote.

Por el contrario, su contraparte orientada a los deportes wake posee un casco (parte inferior del barco) más profundo en forma de “V” y el motor se localiza en la parte posterior de la embarcación. Para modificar aún más la postura de marcha del bote se usa un peso adicional, también llamado lastre, o bien, aletas hidrodinámicas especialmente diseñadas que producen y bombean estelas del mayor tamaño posible para formar rampas de ascenso perfectas para que los wakeboarders logren su mayor tiempo en el aire. Los propulsores están posicionados justo al fondo del bote en favor de la seguridad y el desempeño. En cuanto a la conducción, ésta se realiza mediante un timón giratorio.

Esta configuración permite que los motores intraborda sean la opción ideal para la práctica del cada vez más popular deporte del wakesurf, ya que los surfistas se sitúan muy cerca de la parte trasera del bote. Para practicar el wakesurf nunca se deben utilizar los tradicionales motores de impulsión de popa o los fuera de borda, ya que las hélices están mucho más expuestas.

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La euforia de los deportes acuáticos comenzó con el esquí acuático, y aún hoy, es el pasatiempo favorito de muchos entusiastas. Los niños o principiantes comienzan con esquís combinados (gemelos) y los esquiadores más experimentados se deshacen de un esquí para incursionar en el eslalon, en el que se surca el agua con un solo esquí, que permite mayor flexibilidad. Quienes sientan el deseo de elevarse del agua para flotar un poco, disfrutarán del wakeboard y su aparentemente interminable variedad de maniobras aéreas. Los wakeboarders se montan, con una postura inclinada, en una tabla ancha, de forma similar como lo hacen los skateboarders o snowboarders, y usan la ola o estela del bote como una rampa para elevarse en el aire. La popularidad del wakesurf también está aumentando rápidamente, ya que quienes lo practican tienen la posibilidad de, prácticamente, ir surfeando en la ola creada por el bote. Por sus bajas velocidades, el wakesurf es un deporte de bajo impacto y lo pueden disfrutar personas de casi todas las edades y con diferentes niveles de destreza. Si se desea alterar el tamaño o la forma de la estela del bote, tan sólo se requiere añadir tanques de lastre y aletas hidrodinámicas. Para proporcionan un firme punto de pivote para los esquiadores se hace uso de pilones de arrastre montados en el centro (puntos de fijación para la cuerda del esquiador). Los wakeboarders prefieren torres elevadas para deportes towsport, las cuales elevan del agua el punto de fijación del cabo de remolque para favorecer la altura de los saltos.

… el motor ideal para tu bote.

Los botes con motor de impulsión de popa o de propulsión a chorro siguen siendo la opción ideal para practicar el esquí y el wakebaord de esparcimiento. La postura de marcha del bote puede modificarse mediante un equipo similar a un motor intraborda que incluye aletas y lastre. Si bien los usuales motores de impulsión de popa no son seguros para practicar el wakesurf, hay una nueva innovación —los motores de impulsión de popa orientados hacia adelante— que permite a los fabricantes de motores de impulsión de popa ofrecer, sin riesgos, un motor para la práctica del wakesurf. Los motores de impulsión de popa orientados hacia adelante tienen la hélice en la parte delantera de la unidad impulsora, en lugar de la parte trasera, para situar la hélice en un lugar que no represente riesgos. Los motores de propulsión a chorro, sin hélice expuesta, también son una opción viable para practicar el wakesurf lúdico.

El típico motor intraborda, a veces llamado de transmisión directa, sitúa el motor en el centro del casco para ayudar a mantener una postura de marcha nivelada. El eje de transmisión pasa a través del casco y conecta el motor a una hélice fija. La conducción se realiza mediante un timón gobernable, situado suficientemente detrás de las palas de la hélice.

El motor de transmisión en “V” es una variación de los motores intraborda. El motor se sitúa hacia la parte trasera del bote, o la popa, lo cual amplía el espacio en la zona principal de asientos, o la bañera, y añade peso para aumentar de forma natural la estela del bote. El eje motor se desplaza hacia adelante, hasta un engranaje en forma de “V”, donde la dirección se invierte, y posteriormente sale del casco hacia la hélice fija. La dirección del bote la controla un timón gobernable, situado por detrás de la hélice.

Los motores de impulsión de popa ocultan el motor por debajo de un área de descanso tapizada del bote (o el solárium) o bien, la caja del motor, lo cual permiten contar con una plataforma de baño ininterrumpida en la parte trasera del bote (o la popa). Si bien se puede esquiar y practicar wakeboard detrás de un motor de impulsión de popa, el wakesurf requiere de un motor de impulsión de popa orientado hacia adelante en favor de la seguridad.

Los motores de impulsión de popa orientados hacia adelante —una variación de los motores de impulsión de popa— sitúan la hélice en la parte delantera de la unidad impulsora, no en la parte trasera. Esta configuración oculta la hélice en un lugar seguro, debajo del fondo del bote, o el casco, y hace de estos motores, una opción viable y segura para practicar el wakesurf.

Los motores de propulsión a chorro no tienen una hélice expuesta, en su lugar, cuentan con un impulsor aislado y una boquilla de impulsión que genera la fuerza propulsora del motor. Los motores a chorro pueden aventurarse en aguas poco profundas, ofrecen rápida aceleración y una conducción ágil.

Rápidos, húmedos y salvajes: los motores intraborda proporcionan la potencia y la velocidad que buscan los aficionados a los deportes acuáticos como el esquí y el wakeboard.