embarcaciones personales

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Una categoría que originalmente la definían las embarcaciones para un solo pasajero, y de pie, ha evolucionado hasta convertirse en un amplio mercado que ahora lo caracterizan embarcaciones que guardan cierto parecido con las motos de nieve: con sillas de montar y manillares y con capacidad de transportar desde uno hasta tres pasajeros. Los motores modernos son de cuatro tiempos, sencillos y silenciosos. La potencia del motor sigue siendo generada por una bomba de chorro aislada, lo que favorece la seguridad de la embarcación. Las opciones incluyen desde embarcaciones económicas para principiantes hasta máquinas de alta potencia diseñadas para enloquecer a los entusiastas del desempeño. Las características modernas incluyen sistemas de frenado o desaceleración, retroceso electrónico, control de crucero, modos de navegación a velocidad reducida y sistemas de prevención de robo.

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… las actividades más entretenidas.

El simple hecho de montarse en una embarcación personal es en sí, toda una actividad. Por su —tamaño personal—, la óptima relación peso-potencia, y su excepcional manejo, estas máquinas ofrecen una experiencia acuática como ninguna otra embarcación. Pero las embarcaciones personales son más que sólo juguetes, ya que se han vuelto cada vez más versátiles, con modelos individuales con los que ahora se pueden realizar recorridos turísticos o cruceros y deportes de arrastre y de alto rendimiento. Quienes estén en busca del más alto desempeño y actividades desafiantes, no duden en darle un vistazo al próspero entorno de competencias. Otras actividades populares son los paseos en grupo, poker runs y excursiones de distancias amplias.

… el motor ideal para tu bote.

Opciones de Motores Los motores de propulsión a chorro prescinden de las hélices en favor de un impulsor contenido dentro de una bomba de chorro aislada. El agua entra en la bomba a través de una toma bajo el casco (parte inferior del bote). Esa agua es expulsada a través del tubo de Venturi de la bomba —un cono en forma de embudo que reduce el diámetro de la salida—. El efecto es similar a colocar un dedo sobre el extremo de una manguera de jardín. La velocidad del agua se incrementa, y es esa fuerza la que empuja al bote en el agua.

Los motores de propulsión a chorro son elogiados por sus ventajas de seguridad. No tienen ninguna hélice expuesta, y ya que debajo del casco no hay ningún equipo, los botes con motores de propulsión a chorro pueden andar por aguas más someras que sus homólogos con hélices. Además, los motores de propulsión a chorro suelen producir niveles sorprendentes de aceleración y ofrecen una ágil maniobrabilidad, gracias a una tobera direccional que redirige la fuerza propulsora.

Las embarcaciones personales —ligeras y maniobrables— son la opción perfecta para los amantes de la navegación que buscan un tiempo agradable en el agua.